La marca de origen americano, y más concretamente de Florida, resulta muy competitiva tanto en calidad como en tecnología y todo ello aderezado por un precio de lo más asequible. Así por ejemplo esta Supermotard impulsada por un potente motor refrigerado por agua con culata de 4 válvulas, se ofrece por un precio justo por debajo de la barrera de los 3.000 euros.