Para esta nueva temporada 2012, Yamaha comercializa esta versión exclusiva que conmemora los 50 años que lleva participando la marca de los diapasones en las carreras de los GP. Un toque de distinción con el color blanco de fondo y los colores de guerra en rojo y blanco que vistieron las Yamaha en las parrillas de salida de las décadas de los '60 y '70.